sábado, 29 de marzo de 2008

Sinónimos con humor

Existen muchas maneras de hurgar palabras. En sentido amplio, podemos decir que cada vez que en lugar de usar una palabra la contemplamos, estamos incurriendo en el hurgapalabrismo. A veces nos interesa emprender un viaje en el tiempo en busca de sus antepasados; otras veces nos anima simplemente un espíritu juguetón, que se entretiene en su sonido, o en las asociaciones disparatadas que pueden establecerse con otras palabras. Tal es el caso de estos ejemplos seleccionados del Diccionario de Sinónimos perpetrado por el humorista peruano Sofocleto.

Almuerzo: comedia.
Anteojos: providencia.
Alpinista: becerro.
Aficionado al oporto: oportunista.
Alcancía: colectividad.
Abras la puerta: descentrada.
Adhesión: plegaria.
Abstemio: antiparras.
Baño de asiento: anonadado.
Balanza rota: infiel.
Biblioteca: leonera.
Aire puro: noviciado.
A oscuras: novela.
Antes de la patada: precoz.
Caída: desconsuelo.
Cementerio: crucero.
Film soviético: pelirroja.
Carta: tirabuzón.
¡Bienvenido, Sofocleto, a Hurgapalabras! Y gracias a la maravillosa Cristania, lectora como hay pocas, que con paciencia y cariño rebuscó en librerías de viejo y nos envió desde Perú sus libros en obsequio.
Inauguramos de este modo lo que espero sea un fructífero recorrido a través de la obra de humoristas de distintas regiones que han jugado con el lenguaje, haciéndonos ver las palabras como por primera vez.

viernes, 21 de marzo de 2008

Pascua

Tal vez porque nos ha tocado vivir extraños tiempos que promueven lo moderno, lo transgresor, y lo efímero, el hecho de que se conserven en nuestro lenguaje palabras antiquísimas resulta especialmente conmovedor. Tal es el caso de la palabra hebrea pesaj, que nos devuelve a un tiempo de faraones, éxodos y exterminios ocurridos hace más de tres mil años. A través de su variante aramea pasha, pasó al griego como πασχα, y de allí al latín pascha (léase pasca). En un momento dado, una u foránea se coló dentro de la palabra, transformándola en pascua, y con esa forma se extendió por toda la cristiandad.

La explicación más sólida para la presencia de esa u presupone, según me enseña Corominas, un caso de contaminación. Existía en latín la familia de palabras pasco, pascor, pascua, pascualis, etc. derivadas de la raiz PA- (alimentar), que significaban “pastar”, “hacer pastar”, “campos de pastura”, y nuestros antepasados lingüísticos creyeron que el nombre de la fiesta cristiana pertenecía a esa familia, puesto que la Pascua marca el fin del ayuno cuaresmal, y el núcleo de su celebración consiste en la Eucaristía, el alimento por excelencia. Lo cual nos muestra que muchas veces las etimologías populares están cargadas de sentido. Esa u estableció una diferencia entre pesaj y pascua, así como la muerte y resurrección de Cristo cambió el sentido de la pascua judía.

De la misma raiz PA- provienen pan y pastor, otras dos palabras de profundas resonancias pascuales.

miércoles, 12 de marzo de 2008

Oro que no reluce

Hace 24 años tuve mi primer encuentro con El señor de los anillos. Su lectura me produjo una extraña fascinación: Tolkien plasmaba oscuros anhelos literarios que yo había estado alimentando sin saberlo desde la infancia, y que sólo imperfectamente había atisbado en otros libros.
En esa época no conocía a nadie fuera de mi familia con quien compartir impresiones de esa lectura, y tampoco tenía acceso al texto original (hoy con internet todo eso se ha vuelto fácil). Tolkien me había dejado una sed de cosas diversas, algunas muy profundas, otras simplemente lingüísticas.

Entre estas últimas, siempre me intrigó ese leitmotiv que rezaba No es oro todo lo que reluce, verso inicial de la profecía sobre el retorno de un rey que andaba errante pero no perdido.
En el año 99 (¡hace ya nueve años!) envié a la lista Tolkien un mensaje sobre ese verso, que despertó una interesante discusión. Yo decía:

..el verso en cuestión se constituye en uno de los motivos principales del libro, y alude no sólo a Aragorn sino también al coraje escondido de los hobbits, y en general al homenaje que ESDLA quiere hacer de humildes y pequeños que se alzan en valor mas allá de lo esperado.

Ahora bien, siempre me ha parecido que ese verso, tal como la conocemos en la versión española de Minotauro, dice algo distinto de lo que suponemos, y choca un poco con los otros ("ni toda gente errante anda perdida"). Porque en rigor, la frase "No es oro todo lo que reluce" intenta advertirnos sobre la impostura de quien pretende ser oro (es decir: noble y alto) y no lo es; mal se le podria imputar esa falta a Trancos. En todo caso, al único que le sentaría la descripción es al multicolor Saruman.

Pero el original dice: All that is gold does not glitter.

La sintaxis de esta frase supera mis conocimientos del inglés literario, pero estoy tentado a aseverar que el verso en realidad debería traducirse "No todo lo que es oro reluce", ¡frase exactamente opuesta a la que nos tradujo Porrúa!
La afimación de que a veces el oro no reluce sí se aplica a Trancos, cuyo aspecto y costumbres esconden provisoriamente su destino real.
Alejandro González intervino en aquella oportunidad para opinar que
Tienes razón, aunque se entiende bien que el traductor eligiese traducir así, y de hecho no faltan motivos para apoyarlo. La idea de fondo de ambos refranes, el castellano y el inglés, es que las apariencias engañan. Traducir un refrán por su equivalente funcional en otra lengua, aunque literalmente no coincidan, es en general una buena idea.

Con todo, es verdad que el refrán castellano se inclina por un lado de las apariencias falaces (las cosas aparentemente buenas que no lo son) mientras que el inglés, y el poema en su desarrollo global, van por la orilla contraria (las cosas aparentemente malas que no lo son: las causas perdidas no lo están, lo roto puede volver a unirse, lo que parece viejo puede estar lleno de vigor, quien parece que no va a ninguna parte puede ser el que llega a la verdadera meta, etc.).

Creo que puesto en el lugar del traductor hubiera tomado probablemente al final la misma decisión que él: traducir un refrán por el otro, confiando en la idea común de fondo y sabiendo que el tono general del poema no se prestaría a error. Con todo, si uno se pone a versificar la traducción literal puede ser llevadera:

No brilla siempre el oro
ni sin rumbo anda el errante.
A la raíz profunda
no llega a alcanzar la escarcha.
El viejo vigoroso
nunca llega a marchitarse...
Alejandro Rebagliati expresó que
En síntesis, en este caso le doy la razón a Murgia y se la niego al traductor, pues Tolkien se refirió, claramente, al aspecto andrajoso de Aragorn, que ocultaba a un príncipe, y de ninguna manera quiso aludir a campesino, por ejemplo, que se viste como un rutilante caballero.
Mientras los listeros se inclinaban por distintas posiciones que oscilaban entre perdonar al traductor por tratarse de un detalle nimio y lincharlo por tergiversar el sentido profundo de la obra, Diego Hláford Seguí intervino aportando un dato valioso: la frase que usaba Tolkien era una alteración premeditada del refrán tal como se lo conoce en inglés.

Muchas veces me impresionó la cantidad de refranes y sentencias en general que trae el Señor de los Anillos (y las demás obras del profe, pero ahí especialmente), y me parecía que muchas de ellas no eran exactamente "nuestras", del modo que pueden serlo en castellano "calavera no chilla" o "al que madruga Dios lo ayuda". Digo: que Tolkien usa muchas frases como si fueran hechas en la Tierra Media (perdón: lo de "como si" está de más), pero que no siempre son usadas en inglés. En este momento me vienen a la memoria "Las hojas de Lórien no cae en vano" (cuando Aragorn, Legolas y Gimli encuentran el broche que deja Pippin como señal); o "Mientras hay vida hay esperanzas, y necesidad de vituallas", un anticlímax muy a lo Sam Gamyi. [...]

Por supuesto, lo de "tradicional" es relativo: uno también puede inventar esas gnomai. De hecho, creo que es Bilbo mismo el que compone "All that is gold...", ¿no? Pero es importante que lo haga sobre un modelo que sí es tradicional, i. e. los refranes mismos. Tolkien lo está haciendo. Quizás "Mientras hay vida..." sea del Tío, al fin y al cabo. Quizás todos sean inventados sobre la marcha por los personajes. Tampoco sabemos si Hesíodo no hacía lo mismo. Pero no dejan de dar esa sensación de refrán nuestro [...]

Y pensando en la frase que generó esta polémica, me sonaba algo raro: yo identificaba la forma "All that glitters is not gold", y el diccionario acaba de confirmármelo. Como se puede apreciar, es algo distinta de la consabida "All that is gold does not glitter" (traducción literalísima de las dos: "Todo lo que brilla no es oro" y "Todo lo que es oro no brilla", respectivamente). Si no me equivoco, la frase tradicional en inglés es más equivalente a la castellana "no es oro todo lo que reluce" no sólo en sentido general ("las apariencias engañan") sino literal ("lo hermoso puede no ser tan bueno"). A no ser que me esté salteando algo, Tolkien lo que hace es tomar un refrán inglés conocido y darlo vuelta. Como si en castellano, en vez de "Donde las dan las toman", dijéramos "donde no las toman no las dan", o algo así.

Encuentro hoy una historia de la frase (inglesa), que se remonta al menos hasta Alain de Lisle, también conocido como Alanus de Insulis, quien en el siglo XII escribió:
Non teneas aurum totum quod splendet ut aurum
En dicha historia se cita también The Lord of the Rings, pero -para mi desilusión- el cambio de matiz que introduce Tolkien no le merece al articulista ningún comentario.
Tampoco veo que fuera del reducido mundillo de nuestra lista el defecto de la traducción española haya despertado interés, lo cual no deja de asombrarme un poco. Centenares de miles de páginas web en español sobre Tolkien eluden el tema... Lo cual me hace sospechar que o estoy buscándole el pelo al huevo o las palabras en sí importan cada vez menos en un mundo que fue capaz de acuñar la frase una imagen vale más que mil palabras.